Naturaleza congelada...

Cuando no solo las hojas, la naturaleza misma está helada, sino también lo estás tú, ahí, parado, esperando a que el mañana venga por ti y te robe el tiempo que ya no queda; ahí, mirando lo que el viento se lleva con cada respiro que das.

Petrificado, estupefacto ante tu propia impotencia, sin sentirte, sin vivirte; pobre de mi que soy tan diferente y que me asalta la duda de si mi paso acelerado está mejor que tu estática existencia.

A ti, de manos frías, calculadoras, celosas del ayer, temerosas del mañana...un eterno beso.

Lou Marcel.